La lectura en nuestro país se ha comportado como un candidato político y así debe ser tratada, la canción es insoslayable, su rol en la propaganda ferial es muy importante.
Una canción le hace falta a nuestra Feria del Libro y con razón un vacío grande se siente cada vez que nos deleita con un lema y una imagen.
El despacho de la Primera Dama, ya lo demostró en su pabellón con un violín gigante. No es para vender, sino para que el pueblo lea, para que las bibliotecas se vuelvan populosas.
La canción es un instrumento de propaganda popular, tiene que ser una canción movida y pegajosa como una salsa o merengue, reguetón, es una actividad de jóvenes por antonomasia.
Esperamos que las autoridades culturales hagan el esfuerzo de implementar la canción de feria. Por favor a los amigos amantes de cultura se les ruega firmar este blog en comentarios para apoyar esta iniciativa comunicacional. Hay muchos artistas dominicanos que pueden aportar la canción de la feria del libro como Victor Victor quien coordina el Café Bohemio, Juan Luis Guerra, el salsero Michelle, etc.
Corran la voz a los amigos de la cultura dominicana, estamos para eso, por el aporte con un granito de arena.
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